Rosalina Tuyuc Velásquez es una activista maya de derechos humanos y ganadora del Premio Niwano de la Paz 2012.
Tuyuc, nació en el seno de una familia cristiana de bajos recursos en San Juan Comalapa, Guatemala, Estudió en la escuela hasta cuarto grado primaria y aún así trabajó alfabetizando comunidades, como maestra y auxiliar de enfermería.
Durante su juventud, perteneció a grupos de mujeres y cooperativas artesanales, agrícolas y ganaderas.
El hecho que marcó un antes y después, sobre su trayectoria como activista, fue cuando su padre, Francisco Tuyuc, fue asesinado en 1982 por el Ejército de Guatemala, al igual que su esposo, Rolando Gómez, en 1985.
Con gran dolor y espíritu de lucha, entendió que su caso no es el único, por ello decidió trabajar de manera nacional e internacional por la construcción de un Guatemala Incluyente.
Por ello en 1988, en medio de un conflicto armado, Tuyuc y otras viudas afectadas fundaron la Asociación Nacional de Viudas Guatemaltecas (CONAVIGUA), y actualmente es una importante organización de derechos humanos pionera en la resistencia activa y pacífica.
CONAVIGUA, desde sus orígenes tiene como finalidad, promover la plena igualdad de las mujeres y el respeto de los derechos humanos, desafiando la ética militar y la gobernabilidad de Guatemala. Por esta razón, actualmente miles de mujeres, organizadas y empoderadas, abordan temas como la violencia sexual y la impunidad de las estructuras paramilitares.
Rosalina Tuyuc hasta la fecha, ha ocupado diversos cargos importantes, por ejemplo en la política guatemalteca, fue miembro del Congreso Nacional y magistrada en el primer Tribunal de Conciencia de la Mujer Guatemalteca.
En el ámbito social, en 1994 fue premiada por la Orden Nacional de la Legión de Honor francesa por sus actividades humanitarias y por ello el 6 de julio de 2004 el Presidente Óscar Berger la nombró presidenta de la Comisión Nacional de Resurrección.
Finalmente en el 2012 la Fundación de Paz Niwano de Japón le otorgó el Niwano Premio de Paz por su extraordinario y obstinado trabajo por la paz como una valiente activista y líder de los derechos humanos.
Sin duda, Rosalina Tuyuc, representa a todas las mujeres indígenas, que luchan porque todos sus derechos sean escuchados.
