Los combates entre el Ejército de Sudán y el grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) se intensificaron hoy en la capital, Jartum, después de que las Fuerzas Armadas anunciaran su retirada de las negociaciones para un alto el fuego con su contrincante por desacuerdos.
Testigos indicaron a EFE que los aviones del Ejército bombardearon posiciones de las FAR en el sur de la localidad de Um Durman, vecina de Jartum, mientras que los paramilitares respondieron con disparos de artillería antiaérea, lo que provocó que grandes columnas de humo se elevaran en la zona.
La escalada bélica en Sudán es cada vez más intensa mientras las denuncias de múltiples ONG y diferentes colectivos sociales del país africano continúan sin escucharse.
Una vez más, cómo ya ha sucedido cuatro veces desde su independencia en 1956, los 47 millones de sudaneses se encuentran en inmersos en un conflicto del que no hay perspectivas ciertas de una resolución acordada entre los dos bandos participantes, que parecen decididos a luchar hasta el último hombre.